Engorde de los cogollos

 

Cuando llevamos sobre los 40 días desde que cambiamos las horas de luz en interior a 12h, o entramos más o menos en el mes y medio – dos meses de verano, veremos como nuestras plantas ya muestran buenas flores, llenas de cálices y de pelos blancos en gruesas porras formando colas. En ese momento, nuestras plantas empiezan a engordar cada vez más sus flores para tener más posibilidad de ser polinizadas, pero para engordar consume altas dosis de su alimento preferido en floración, el fósforo y el potasio.

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Los abonos de engorde suelen llevar una alta concentración de PK, los más potentes superan el 0-50-30 y se usan una vez a la semana, y hay más flojos que se usan en casi todos los riegos. Úsalo junto a tu abono de floración de la siguiente manera, un riego floración + azúcares, un riego con floración + engorde, un riego de agua hasta que veas que ya no tira apenas más cálices nuevos, será el momento de dejar de abonar y empezar con el lavado de raíces. Hay que contar que quedarán unos 15 días de cultivo todavía.

Hay que dejarla que se haga bien hasta el final, ya que en las últimas dos semanas es cuando más densa se hace y más gruesa, si la cortas demasiado pronto perderás bastante cantidad de cogollos en seco, más vale esperar más que cortarla pronto, tendrás recompensa.

 

La orientación más o menos es esperarte dos semanas más del tiempo de floración que pone en el paquete, ya que los bancos de semillas no cuentan desde que se cambia la luz las semanas de floración en interior, sino cuando ya han pasado la prefloración, que tarda de 10 a 15 días. Las fechas de exterior suelen coincidir bastante bien, ya que están plantadas en el hemisferio Norte, justo donde vivimos nosotros!!